¿Sabías que el 53% de los visitantes de sitios web móviles abandona una página si tarda más de 3 segundos en cargarse? La mitad del tráfico total de las webs proviene de móviles, pero los porcentajes de conversiones en estos dispositivos son inferiores a los de las conversiones que se producen en ordenadores (Google).
Si vendemos poco, podemos pensar que lo que necesitamos es conseguir que más usuarios visiten nuestra web. Sin embargo, muchas veces puede que el número de visitas sea muy alto, mientras que el de conversión es muy bajo. Estos casos son un claro ejemplo de que lo que se debe mejorar es el Conversion Rate Optimization (CRO).
¿Qué es el ratio de conversión?
Antes de profundizar en qué es el CRO, debemos entender qué es el ratio de conversión.
El ratio de conversión es el porcentaje de visitantes de tu web que han completado una acción específica, como rellenar un formulario de contacto, suscribirse a la newsletter o comprar un producto. Se calcula siguiendo la siguiente fórmula:
Por ejemplo: Si tu web recibe un total de 500 visitantes al mes y has vendido 30 productos, el ratio de conversión es el siguiente:
(30 : 500) x 100 = 6 %:
Dependiendo de cuál sea el tamaño de nuestro negocio, podemos pensar que vender 30 productos en un mes (uno al día) es mucho. Sin embargo, al calcular el ratio de conversión y obtener solo un 6%, observamos que, teniendo en cuenta el número de visitantes, deberíamos convertir mucho más. Por lo tanto, hay que analizar nuestra página web para detectar qué es lo que está ocurriendo y por qué los usuarios no compran nuestros productos. Aquí es donde entra en juego el CRO.
¿Cómo calcular el ratio de conversión?
Conversion Rate Optimization (Optimización del Ratio de Conversión) consiste en llevar a cabo una serie de técnicas para que el sitio web esté optimizado para facilitar que los usuarios realicen unas acciones concretas, como comprar un producto, llamar al número de la web, rellenar un formulario de contacto, etc.
Como hemos visto, hay que analizar por qué no nos contactan o no nos compran. Tal vez el tiempo de carga es muy alto (puedes calcularlo aquí), la web no es intuitiva y cuesta navegar, la pasarela de pago no funciona bien, las fichas de productos no tienen suficiente información, o tal vez nos han contactado por formulario web y hemos tardado mucho en contestar (o ni lo hemos hecho).
¿Cómo mejorar nuestro CRO?
Una vez tengamos claro el problema, debemos ponerle solución: mejorar el diseño y la usabilidad de la web, arreglar la pasarela de pago, modificar y aumentar los datos de los productos, añadir botones Call To Action (CTA) en sitios clave, ampliar el equipo de atención al cliente… Estas son algunas de las acciones que podemos llevar a cabo para mejorar nuestro sitio web, pero todo depende del tipo de negocio que tengamos o del público objetivo al que queramos dirigirnos, ya que los mensajes en nuestra web deben ser personalizados para llamar más la atención de un perfil concreto.
Además, sea cual sea la audiencia a la que nos dirijamos, debemos optimizar el rendimiento de la web para que cargue más rápido. Como hemos visto, el tiempo de carga afecta notablemente a las ventas: Un solo segundo de retraso en la carga de un sitio web móvil puede suponer una disminución de las conversiones de hasta un 20% (Google).
Es posible que, al realizar estas acciones, disminuya el número de visitas que recibe nuestra web. Esto se debe a que, al haber ajustado nuestra página para enfocarnos a un público en concreto, los usuarios que no estaban realmente interesados en adquirir uno de nuestros productos dejarán de visitarla. Por otro lado, accederán más usuarios de un gran valor para la empresa, usuarios cualificados, puesto que serán más afines a nuestro buyer persona (perfil de cliente ideal). De esta forma, se disminuyen las visitas, pero aumentan las conversiones, lo que se traduce en un aumento del ratio de conversión.
Hay muchas formas de mejorar el CRO de tu página web. ¡Calcula tu ratio de conversión y ponte manos a la obra!